Por Cesar Rios
ASEFIN Asociación Salvadoreña de educación financiera.
Mayo 2012
Dentro del ámbito de
participación ciudadana, que el actual gobierno ha hecho tanto énfasis, resulta
contradictorio observar una ley y sus procedimientos de participación, la cual
limita a los salvadoreños viviendo fuera a que deben estar legalmente
constituidos para poder formar parte Concejo Nacional para la Atención y
Desarrollo de la Persona Migrante y su Familia (CONMIGRANTE).
Con la madures social, política y
económica con la que se está tratando el tema migratorio en El Salvador,
celebrábamos con mucho interés la aprobación de la ley de protección a
salvadoreños en el exterior, pero no se esperaba que esta podría provocar una
de las mayores contradicciones de interés mundial, porque los salvadoreños
están casi en mas de la mitad del planeta, son el 30% de la población viviendo
fuera, equivalente a 3 millones, y según la ley solamente pueden participar en
el concejo nacional 3 salvadoreños y todavía segmenta los criterios de
selección, dos salvadoreños residiendo en Estados Unidos y uno en Europa, y que
no sean ilegales, que estén formalmente constituidos en los países de
residencia.
Se podría calificar este acto
como un irrespeto a todas aquellas organizaciones que con mucho esfuerzo y por
muchos años han estado contribuyendo al desarrollo de sus municipios, sin
interesarles legalizarse, como dijo un compatriota en Virginia… “para ayudar a su pueblo no hay que
ser legales, se ayuda y ya”. Negarles el derecho a participar,
negarles el derecho a decidir, es uno de los primeros obstáculos que debe
superar la tan anunciada ley. En El Salvador contamos con un Vise Ministerio
especializado en el tema, esperaríamos que sus funcionarios expertos no esperen
que se agudicen estas contradicciones o conflictos de intereses y propongan lo
mas pronto posible una solución que garantice la mayor participación de los
salvadores en el exterior en la política nacional.
Sobre la participación de los
salvadoreños en el exterior hay que resaltar que El Salvador tiene el
privilegio de tener una de las diásporas más organizadas en el continente,
caracterizada por su pro actividad y persistencia. Una caracterización, más
próxima, de la organización existente de salvadoreños en el exterior podría ser
la siguiente:
1.
Organizaciones
con agenda nacional. Quienes tienen en su agenda una propuesta sobre la
realidad nacional. Por ejemplo, voto en
el exterior, participación económica de los migrantes, entre otros. Un ejemplo de ellas es la Asociación
SALVADOREÑOS EN EL MUNDO.
2.
Organizaciones
comunitarias. Surgen por iniciativa de desarrollo local, existen muchas
que se han creado y que han participado principalmente en la obra social de su
comunidad de origen. Ejemplo de ellas
es la organización de EL PICHE.
3.
Organizaciones
globales, Existe un liderazgo activo salvadoreño en la conducción y
composición del fenómeno migratorio a nivel global, existen mesas de análisis
del fenómeno en temas concretos, por ejemplo Red NALACC y La liga de
sustentadores de la comunidad global.
4.
Organizaciones
altruistas. Promueven campañas médicas, construcción de obra social y
participación en la búsqueda de soluciones a problemas sociales hay un
liderazgo salvadoreño activo. Es el caso
de clubes Rotarios internacionales, en San Francisco es muy acentuado esa
participación de empresarios salvadoreños.
5.
Organizaciones
temáticas, Se han observado
intercambios y apoyos concretos en aspectos temáticos como cultura,
deporte.
El pleno del Concejo
(CONMIGRANTE), según la ley, debe estar integrado por dos instancias, una gubernamental y otra
no gubernamental, y limita la participación de las asociaciones migrantes a
tres representantes. Tomando en cuenta la realidad organizativa de los
salvadoreños y la representatividad de la población salvadoreña en las
realidades de terceros países, sería
interesante crear otra instancia exclusivamente integrada por salvadoreños en
el exterior para abrir la posibilidad y
garantizar una mayor participación,
representación y transparencia.
Si el CONMIGRANTE tiene dentro de sus atribuciones y
obligaciones gestionar recursos y procurar asegurar su auto sostenibilidad, se
debe tomar en cuenta las tendencias de la cooperación internacional y el comportamiento histórico, disposición y
apertura a contribuir en todo momento a El Salvador por parte de la población
salvadoreña en el exterior, para ello se recomienda asegurar tres grandes
componentes: El capital social, la agenda colectiva y la Promesa de valor. Si
los salvadoreños en el exterior no hacen una promesa de valor de esta ley y su
concejo migratorio no se esperaría un resultado tan positivo, y se estaría
negando la participación ciudadana en un problema nacional como es la
migración.
http://salvadorenosenelmundo.blogspot.com/2012/05/los-salvadorenos-en-el-exterior-que-no.html